¿Cuál es mi lugar en el mundo? ¿qué sentido o propósito tiene mi vida? ¿quién o qué soy yo? ¿soy un ser aislado e independiente o por el contrario formo parte de un todo integrado?
La espiritualidad abarca aspectos más sensibles y menos materiales que son difíciles de explorar en una sociedad como la nuestra. Esta faceta humana necesita encontrar el espacio y la tranquilidad necesaria para comenzar su investigación.
La espiritualidad puede ser abordada desde muchas orientaciones y escuelas filosóficas (y por supuesto, también desde la religión).
Es un camino de exploración personal en donde el proceso, las preguntas y el no-saber se hacen tan relevantes como las respuestas.
Desde la psicología no podemos ignorar esta parte y necesidad fundamental de muchas personas y debemos ofrecer un espacio seguro de exploración de estas cuestiones.